(II PARTE DE LA SERIE "MI HIJO EL PROSPECTAZO")
Generalmente escuchamos en los
campos de beisbol de escuelas o divisas la expresión “a fulano lo llamaron para un Try-out”. La expresión se refiere a
las pruebas que hacen los equipos profesionales a peloteros juveniles que aspiran
a ser profesionales.
En esas pruebas les
miden la velocidad de lanzamiento, velocidad al correr, observan las
capacidades de bateo y fildeo y la resistencia física entre otros elementos.
¿Alguna vez alguien ha escuchado que alguna Universidad o Institución de
Educación Superior Venezolana ha convocado un Try-out (como lo hacen
universidades extranjeras) para captar peloteros?. Seguramente que no.
Pero la estrechez mental de quienes
dirigen a las instituciones de educación superior (tanto públicas como privadas)
Venezolanas, no es la única causa que impiden la realización de Try-outs
universitarios criollos para captar al mejor talento deportivo nacional, con el
fin de que no sólo jueguen para la selección de la institución, sino que también
estudie una carrera profesional en ella estimulando así el desarrollo de un
estudiante universitario integral.
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| La escuelas que funcionan en una universidad deberían luchar por esta idea |
Otra razón por la que no se
realizan estos eventos es la estrechez mental de quienes “dirigen” a las
Federaciones deportivas del país, sin contar a los que nunca ven, escuchan ni
saben nada de la realidad (los burócratas de los Ministerios del Deporte, Educación
y Educación Superior) que viven muchos buenos deportistas venezolanos que al
llegar a las categorías juveniles de sus respectivas disciplinas, y estando en
plenitud de condiciones para continuar su carrera como atletas de alto
rendimiento, se encuentra en la disyuntiva entre seguir en el deporte pero
pasando el trabajo parejo, abandonar el
deporte y dedicarse a su carrera universitaria o la mas mala de las tres
alternativas: no hacer ni la primera ni la segunda opción y pasar a engrosar las filas
del desempleo o el empleo con salarios miserables. Las “alternativas” que hemos
mencionado confirman lo que queremos plantear: el deporte universitario en
Venezuela no es considerado como una opción para el jóven deportista que egresa
de bachillerato y está en las llamadas categorías de ascenso. (En el caso de béisbol
sub 21, clase A, etc.).
Si bien es cierto que esta
situación es generada por la parranda de
mochos ya mencionados – Federaciones, Direcciones de Deportes
Universitarias y burócratas del gobierno- también lo es que las mal llamadas universidades
autónomas de carácter público, tienen la mayor cuota de responsabilidad
en esta situación, porque no saben (o no quieren) desarrollar una política de
ingreso que les permita captar al mejor talento deportivo emergente basados en
esa autonomía
que tanto dicen defender. La autonomía universitaria no se
refiere a la creación de especies de “estados vaticanos” en cada una de las
ciudades en las que tienen su sede estas universidades, la autonomía que tienen
nuestras “máximas casas de estudios superiores” nacionales es para formular
políticas inherentes a su actividad, y el deporte es precisamente una de las
actividades inherentes a una universidad.
Este es uno de los temas que
pretendemos tratar en la temporada 2014-2015, pensar en el desarrollo de un
sistema de Try-outs universitarios con el fin que el
mejor talento deportivo nacional en beisbol, basket, fútbol, Sotfbol, etc., del país tengan otra opción para continuar practicando deporte y estudiando y no ser presa fácil de los scouts que les meten pajaritos en la cabeza sobre las posibilidades que tienen como "prospecto de las grandes ligas".
Esta idea debería ser de mucho interés para aquellas escuelas que funcionan o son patrocinadas por instituciones u organizaciones relacionadas a las universidades, como es el caso de la U,U, UCV, la casa que
supuestamente vence las sombras………..
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