Cuando
las personas “militan en una causa”, sea esta política, social,
económica, etc., y el rol que desempeñan es el de dirección,
además de participar en la planificación, administración y
ejecución de las actividades inherentes “a la causa”, están
también en la obligación de trabajar para ganar mas “adeptos” por la sencilla razón que “la causa” no sólo requiere desarrollar a la
generación de relevo en los cargos de dirección de la(s)
organización(es) jurídicas que la representan, sino también mantener su viabilidad histórica, es
decir trascienda para las generaciones futuras.
Lo
anterior no es invento nuestro, ni lo estamos diciendo creyendo que
estamos descubriendo
el agua tibia,
es simplemente como dice la expresión popular ley
de la vida. Si
lo anterior no fuera cierto, entonces la sociedad tal y como la
conocemos hoy en día no hubiese sido posible, y en consecuencia
organizaciones deportivas – para ir ya al punto que queremos tratar
- de gran popularidad no sólo local sino internacional no
existirían.
La
historia esta llena de ejemplos de casos en los que la organización
(expresión orgánica de “la causa”) o se comporta como el ron añejo –
mientras mas se añeja mejor es el sabor – o desaparece porque “la
causa” por múltiples factores pierde viabilidad, y su continuidad
histórica pierde sentido trayendo como consecuencia que su
expresión organizativa desaparezca o se transforme en otra que si
este en mejores condiciones de seguir adelante.
Es por esto, que el Comité Olímpico Venezolano (COV) y la Federación Venezolana de Beisbol (FVB), han diseñado una propuesta denominada Programa Sembrando el beisbol, para el cual vamos a dedicar nuestro modestos esfuerzos para apoyarlo, porque a pesar de las diferencias que podamos tener en cuanto a la gestión que realizan quienes en la actualidad ocupan cargos de dirección en la FVB y el COV, coincidimos con ellos en la idea que en las actuales circunstancias nacionales e internacionales, se hace necesario diseñar y poner en práctica políticas que nos aseguren no sólo corregir las debilidades existentes, sino “re-implantar” - para decirlo de alguna forma – la práctica del beisbol en Venezuela como una de las disciplinas deportivas de mayor aceptación popular.
Seguramente
algunos de nuestros lectores se preguntaran, ¿y como es eso de sembrar el beisbol en un país que tiene una trayectoria en la practica de este deporte,
además de ser su práctica una actividad que forma parte de nuestra
cultura popular?. ¿Sembrar el beisbol en un país que ha dado grandes peloteros?.
Aunque parezca un
contrasentido si es pertinente y acertada la idea de desarrollar
un plan que permitan a
quienes “militan en la causa del beisbol Venezolano” (peloteros,
técnicos, umpires, anotadores, aficionados, personal del
mantenimiento de las instalaciones y fabricantes de
implementos y uniformes (1)) , no sólo hacer los campeonatos, sino
también reimpulsar la práctica del beisbol con criterios que
permitan recuperar el espacio perdido en cuanto a la calidad técnica
y cantidad de personas que lo practiquen.
En
tal sentido vamos a estar trabajando en los meses por venir en base a
esta idea, la cual va a ser el fundamento de propuestas ya hechas y
por hacer, como por ejemplo la de realizar una serie de 3 o 5 juegos
entre los equipos que se titulen campeones en la categoría juvenil
en las Ligas capitalinas LIMENOR y JUVENIL ESPECIAL UCV, o la otra
que vamos a poner
sobre la mesa
en los próximos días: LA CREACIÓN EN EL DC DE LA LIGA DE BEISBOL
UNIVERSITARIA.
Esta idea también será el fundamento para tratar de desarrollar otra actividad que tendrá como objetivo minimizar una gran debilidad que tenemos en este momento, como lo es la falta de información relativa al desarrollo de los campeonatos de ligas. Esta debilidad de no subsanarse por parte de las ligas, se puede convertir en un obstáculo para el desarrollo del programa Sembrando el beisbol, porque nosotros creemos que para que este programa tenga éxito, debe entre otros elementos, desarrollar una sólida política comunicacional a través de los medios de comunicación social, priorizando a los locales (radios y TV comunitarios y/o regionales) y los electrónicos (paginas web, blogs, facebook, twitter, etc.), los primeros porque si estamos hablando de sembrar el beisbol debemos fortalecer el trabajo en las comunidades, es decir debemos concientizar a la base social del sistema, y los segundos por su relativo bajo costo de desarrollo o de colocación de campañas divulgativas, promocionales y de patrocinio con respecto a los grandes medios de Radio y TV. Por último estan los grandes medios, porque sería una necedad no reconocer su gran poder de comunicación.
La otra actividad que vamos a tratar de hacer a partir de la próxima temporada, la
denominaremos ZONA PARA MANAGERS Y DELEGADOS, la cual tendrá como objeto convertir a cada mánager y/o delegado de equipo en
un reportero deportivo comunitario en beisbol, porque repetimos, si
queremos Sembrar el beisbol
en Venezuela debemos involucrar a todos aquellos que hacen vida en
la actividad para que el programa no se quede sólo en un documento
archivado en la oficina del COV y la FVB, o se mencione en sus
respectivas paginas de internet y la noticia publicada no tenga
ninguna relación con la realidad que se ve a diario en los campos de
beisbol de Venezuela…………..
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